Del 7 de mayo al 2 de agosto de 2009 se podrá visitar en el Museu d'Història de Catalunya de Barcelona (Pl Pau Vila, 3. Ciutat Vella) la exposición "Princeses de terres llunyanes. Catalunya i Hongria a l'Edat Mitjana".
Esta muestra expone las relaciones entre Hungría y Cataluña desde el siglo XII al XVI.
Las princesas en esa época se casaban entre los dieciséis y los diecinueve años, con maridos que a menudo ni conocían . Ser princesa significaba a menudo tener que marcharse a tierras lejanas y cumplir con un papel muy determinado, donde lo que más importaba, en el fondo, era ser fértil y dar a luz a los futuros sucesores reales.
Las princesas en esa época se casaban entre los dieciséis y los diecinueve años, con maridos que a menudo ni conocían . Ser princesa significaba a menudo tener que marcharse a tierras lejanas y cumplir con un papel muy determinado, donde lo que más importaba, en el fondo, era ser fértil y dar a luz a los futuros sucesores reales.
En la exposición se mostrará el caso de cuatro princesas en concreto:
Constanza de Aragón
Formada desde pequeña para ser reina, a Constanza el matrimonio le duró sólo ocho años. Cuando su marido falleció (Emeric de Hungría), se convirtió en la forastera de una corte en guerra.
Constanza volvió a la Corona de Aragón y volvió a casarsel, esta vez con Federico II de Sicilia, que se convirtió en rey de los alemanes. De esta manera, Constanza fue "la catalana que ha disfrutado de más poder en la historia".
Constanza volvió a la Corona de Aragón y volvió a casarsel, esta vez con Federico II de Sicilia, que se convirtió en rey de los alemanes. De esta manera, Constanza fue "la catalana que ha disfrutado de más poder en la historia".
Violant de Hungría
Esta reina se casó con Jaume I, sobrino de Constanza en 1235.
Dicen que, aunque el rey era un mujeriego, los dos príncipes se enamoraron mutuamente. Violant, además, fue una buena esposa, dio luz a diez hijos, que ocuparon lugares de poder en las dinastías europeas.
Pero, la principal contribución de la princesa de Hungría fue aportar la idea de la santidad real.
Dicen que, aunque el rey era un mujeriego, los dos príncipes se enamoraron mutuamente. Violant, además, fue una buena esposa, dio luz a diez hijos, que ocuparon lugares de poder en las dinastías europeas.
Pero, la principal contribución de la princesa de Hungría fue aportar la idea de la santidad real.
Beatriz de Aragón
Beatriz de Aragón se casó con Matias Corví. Este rey aprovechó la boda con Beatriz para dar prestigio a su cargo. La reina desarrolló tareas de representación pero se dedicó al mecenazgo.
El matrimonio construyó una de las bibliotecas humanistas más importantes de la época, en el palacio real de Buda.
El matrimonio construyó una de las bibliotecas humanistas más importantes de la época, en el palacio real de Buda.
María de Habsburgo
María de Habsburgo, nieta de Fernando el Católico, fue la última reina de Hungría. Esta reina se casó con el húngaro Luís de Jagellón.
El matrimoniole duró pococinco años, ya que su marido murió en una batalla. Renunció a volver a casarse, así que pasó a ser conocida como la reina viuda.
No obstante, los hermanos de María le confiaron poder y ejerció diferentes cargos entre los cuales esta el de regente de los Países Bajos.
El matrimoniole duró pococinco años, ya que su marido murió en una batalla. Renunció a volver a casarse, así que pasó a ser conocida como la reina viuda.
No obstante, los hermanos de María le confiaron poder y ejerció diferentes cargos entre los cuales esta el de regente de los Países Bajos.
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