AROMA DE FINAL
Pasado ya el “trámite” liguero ya se percibe en el ambiente esa fragancia a la que tanto nos hemos acostumbrado estos últimos años. Ese olor inequívoco que olfateamos por las calles de Sevilla cuando se aproxima un acontecimiento de tal magnitud. Esa esencia que nos evoca las grandes noches de gloria vividas por esta afición. Fechas y lugares que nos retraen en el tiempo: 13 de abril de 2006 (Gelserkitchen), 27 de abril de 2006 (Jueves de Feria), 10 de mayo de 2006 (Eindhoven), 25 de agosto de 2006 (Mónaco), 3 de Mayo de 2007 (La remontada ante Osasuna), 16 de mayo de 2007 (Glasgow), 24 de junio de 2007 (Madrid)….y algunas otras que me dejo en el camino.
La cita del próximo miércoles debe servir para avivar más que nunca la llama del sevillismo y conseguir hacer llegar a nuestros jugadores el calor de su afición a pesar de la distancia. Es el momento para enterrar viejos rencores y unirnos más que nunca. Estoy convencido que se marcará un punto de inflexión y a partir del jueves el devenir de este proyecto será respaldado por la inmensa mayoría de sevillistas. Desde este humilde portal únicamente pediría respeto para aquellos escépticos, entre los que me he podido encontrar, que en alguna ocasión hemos cuestionado la labor del entrenador e incluso del Director Deportivo de la entidad. La marcha del equipo hasta este momento, y a pesar de las adversidades, ha sido muy meritoria, por lo que nos debe impulsar a confiar en las personas encargadas de dirigir la nave.
Por todo lo esgrimido saquemos nuestro orgullo, presumámos de sevillistas y volvamos a engalanar nuestros balcones con banderas rojiblancas.
Volviendo al partido, el ambiente que nos espera va a ser infernal, San Mamés rugirá como nunca, miles de enfervorizados empujarán a su equipo. Llevan más de 25 años sin disputar una final por lo que la cita cobra tintes de duelo a muerte.
El Sevilla tendrá mucho ganado si vuelve a sacar a relucir sus grandes virtudes: posesión del balón, profundidad en las bandas, gran calidad en los metros finales y por encima de todo el dominio de la situación en los momentos claves del partido.
Si seguimos estas pautas tendremos muchas opciones de volver a citarnos con la historia en una nueva final. Valencia espera a NUESTRO SEVILLA.
Manolo Rey
P.D: Les rogaría que los comentarios se inserten directamente en esta web para que podamos intercambiar impresiones sobre el estado actual de NUESTRO SEVILLA. Gracias.
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3 comentarios:
El partido del sábado es el espejo en el que debe mirarse el Sevilla el próximo miércoles, es el camino a seguir. Todo lo que sea cambiar el guión y querer jugar a contracorriente es sentenciarse. Y si digo esto es por el hecho de que si hay un equipo que tiene que tomar precauciones es el A.T. Bilbao y no el Sevilla F.C.. Así que hay que seguir en la misma onda y por su puesto con esa dosis de fortuna que hace falta para llegar a una finalísima. Felicidades por ser sevillistas.
El Anonimo se crea su propia columna al igual que la de don Manué.
Como todas las semana el inclito periodistas aficionado (epiteto,solo leer una articulo suyo) nos regala una soneto mas de convencionalismos y frases vacias,verbi gratia: "engalanemos nuestro balcones","rememos en la misma dirección","avivar la llama del sevillismo" un etc tan largo como la A4,pero no desde Sevilla a Cadiz sino desde su origen en el km 0 de Madrid.
Illo,manué, cambia de estilo y se mas duro y directo quizás los pelotas que te halagan en el foro no sepan interpretarlo pero el quitarte la camisa de fuerza,ese yugo de decir lo que la gente quiere que digas te va a sentar bien.
Creo que el momento de apoyar al equipo y no de realizar críticas, entiendo que haya gente que no le gusten ciertas cosas, y gente que siempre está desacuerdo con todo, pero lo más inteligente es esperar a final de la temporada y añalizar los resultados. Por ahora estamos los terceros en la liga, sacando 5 puntos al cuarto y en semifinales de la copa del Rey, si vemos la larga historia del Sevilla pocos años nos hemos encontrado en una situación similar, por lo que por ahora hay que estar contentos.
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